Capítulo 1: Átomos y moléculas en el universo / La tabla periódica de los
elementos
Astrónomos
y físicos han postulado como origen del Universo una gran explosión, que a
partir de un gas denso formó las innumerables galaxias que ahora pueblan el
Universo. Una de dichas galaxias es la Vía Láctea, formada por más de 100 mil
millones de estrellas, entre las que se encuentra nuestro Sol.
Cuando la temperatura del Universo era de alrededor de mil millones de grados,
se comenzaron a formar los núcleos de los elementos. Primero se formaron los
más simples, el hidrógeno (H) y el helio (He); posteriormente, en el interior
de las estrellas se fueron formando los núcleos de otros elementos, hasta
llegar a un número cercano a 100.
Los primeros elementos formados, que son
también los más ligeros, el hidrógeno (H)
y el helio (He), siguen siendo
los principales constituyentes del Universo. El hidrógeno se encuentra en una
proporción superior a 90% y el helio en alrededor de 8%. Estos elementos son
más abundantes en el Sol y en las otras estrellas.
El hidrógeno, el elemento más sencillo
y más abundante en el Universo, es un gas más ligero que el aire, por lo que,
al llenar un globo con él, habrá necesidad de sujetarlo, o de lo contrario, se
elevará por los aires. Esta propiedad fue aprovechada por el hombre para viajar
por la atmósfera. Desde finales del siglo XVIII se construyeron máquinas voladoras para transportar
hombres y equipo. Estas naves, llamadas dirigibles, eran peligrosas por el
carácter inflamable del hidrógeno con el que se habían llenado.
El átomo de hidrógeno (H), como hemos dicho, el elemento más
sencillo del Universo, está formado por un núcleo, llamado protón, que posee
una carga positiva, la cual se encuentra neutralizada por un electrón (carga
negativa).
PROPIEDADES DEL AGUA
2H2 +
O2
2H2O + calor (fuego)
Hidrógeno
+ oxígeno + agua + fuego
El agua, producto formado en la combustión del hidrógeno, es la molécula más
abundante en la Tierra, donde se le encuentra en sus tres estados físicos: como
líquido, cubriendo las 3/4 partes de la superficie del planeta, constituyendo
mares, ríos y lagos; como vapor, en grandes cantidades en la atmósfera, de
donde se precipita como lluvia o nieve, y en su estado sólido (hielo), formando
depósitos sobre las altas montañas y cubriendo las regiones polares y en este
caso en tal cantidad, que si este hielo se fundiera, el nivel del océano
subiría de tal manera que inundaría la mayor parte de las ciudades costeras y
gran parte de las tierras bajas, incluyendo países enteros como Holanda, que
quedaría totalmente bajo las aguas. Esta molécula tan singular y abundante es
la base de la vida; constituye más de la mitad del peso de los seres vivos. En
los organismos marinos se le encuentra en una proporción de más de 90% en peso.
El agua, en estado puro, es un líquido incoloro, inodoro e
insípido. Las propiedades físicas de tan importante sustancia a menudo se toman
como tipo: su punto de fusión es de 0° su punto de ebullición a nivel del mar
es de 100° la mayor densidad del agua se alcanza a 4°, siendo de 1 g/ml, es
decir que cada mililitro pesará un gramo y por lo tanto un litro pesará un
kilogramo.
El hecho de que el hielo sea menos denso que el agua líquida
tiene gran importancia en el mantenimiento de la vida en las regiones frías del
planeta: cuando un lago se congela, sólo lo hace en su superficie, ya que el
hielo, por ser menos denso que el agua, flota sobre ella y, por ser mal
conductor del calor, aisla las capas más profundas impidiendo su congelación,
con lo que se logra mantener las condiciones apropiadas para la conservación de
la vida. Este hecho afortunado para la vida en el planeta tiene, sin embargo,
consecuencias negativas para lo que llamamos progreso de nuestra civilización,
ya que los grandes témpanos de hielo (icebergs) son un peligro para la
navegación en aguas frías y han destruido muchas embarcaciones.
AGUA
OXIGENADA, PERÓXIDO DE HIDRÓGENO H2O2
El
agua no es la única combinación que puede obtenerse entre hidrógeno y oxígeno.
Existe además un compuesto que tiene un átomo de oxígeno más que el agua. La
sustancia así formada es conocida como agua oxigenada, llamada con más
propiedad peróxido de hidrógeno, cuya estructura es
H2O2 o
HO-OH. Esta sustancia, por tener un átomo de oxígeno extra, es inestable,
es decir, libera oxígeno con facilidad para quedar como agua común. El agua
oxigenada, por su facultad de liberar oxígeno, mata a muchos microbios por lo
que se emplea como desinfectante de heridas, en cuyo contacto se puede ver al
oxígeno desprenderse en forma de burbujas.
El
agua oxigenada que se consigue en la farmacia como agente desinfectante es muy
diluida, contiene sólo tres partes de agua oxigenada por 97 de agua común. El
agua oxigenada que se emplea como oxidante en laboratorios químicos es más
concentrada, pues contiene 30 partes de
H2O2 por
70 de agua ordinaria. Esta solución tan concentrada es peligrosa, puesto que
causa quemaduras al ponerse en contacto con la piel.
El agua oxigenada se emplea como
decolorante, por lo que se utiliza, entre otras aplicaciones, para aclarar el
color del pelo.
2 H
2O
2 
2 H
2O
+ O
2
PREPARACIÓN DE HIDRÓGENO
El hidrógeno se puede liberar de las
moléculas en las que se encuentra combinado con otros elementos. Ya que el agua
es el compuesto de hidrógeno más abundante y accesible, será la materia prima
en que primero se piense para preparar hidrógeno. Como el agua está formada por
átomos de hidrógeno (H
.),
cuyo único electrón se pierde con cierta facilidad para dar iones positivos (H
+) al pasar una corriente
eléctrica a través del agua, es de esperarse la generación de protones que, por
tener carga positiva, serán atraídos hacia el polo negativo (cátodo), donde se
descargarán, liberando, por tanto, hidrógeno gaseoso (H
2)
Sin embargo, existe el problema de que
el agua pura es mala conductora de la corriente eléctrica, por lo que es
necesario disolver en ella una base o un ácido fuerte que la hagan conductora.
Disolvamos, por ejemplo, ácido nítrico (HNO
3),
cuyo protón se separa con facilidad (HNO
3
H + NO
3-) de los iones nitrato (NO
3-). En esta
solución, que ahora es conductora, los protones, por tener carga positiva,
viajarán hacia el cátodo o polo negativo, donde se descargan generando dos
volúmenes de gas hidrógeno, mientras que en el polo positivo o ánodo se
desprenderá un volumen de oxígeno gaseoso.
A esta reacción se le conoce como
electrólisis, es decir, ruptura de una molécula por medio de electricidad. Tan
útil reacción no sólo se emplea para romper la molécula de agua, sino que se
usa también para liberar los metales de sus sales.
Capítulo 2: El átomo de carbono, los hidrocarburos, otras moléculas
orgánicas, su posible existencia en la tierra primitiva y en otros cuerpos
celestes
La
teoría de la gran explosión como origen del Universo
concibe la formación del átomo de carbono (peso atómico = 12) en el interior de
las estrellas mediante la colisión de tres átomos de helio (peso atómico = 4).
La generación del carbono y de los
átomos más pesados se dio en el interior de las estrellas antes de la formación
de nuestro Sistema Solar, cuyo nacimiento, a partir de materiales cósmicos,
polvo y gas provenientes de los restos de estrellas que explotaron, se remonta
a un pasado inimaginable: algo así como 4 600 millones de años.
Cuando la tenue nube de polvo y gas fue
comprimida por la onda de choque producida por la explosión de una estrella de
las llamadas supernovas, se formó la nebulosa en cuyo centro la materia se
concentró y calentó hasta producir nuestro Sol.
Rodeando al
Sol, la materia fue siendo cada vez mas fría y sus elementos constitutivos más
ligeros. Con este material se formaron los planetas y sus lunas.
La diferente composición química del
cuerpo de los planetas y de su atmósfera se debe en parte a que se formaron en
regiones de la nebulosa con distintas temperaturas, por lo que los planetas
interiores, Mercurio, Venus, Tierra y Marte, son rocosos, con gran proporción
de metales, óxidos y silicatos. En cambio, los planetas exteriores contienen
más gases. Así, los planetas interiores han perdido alrededor de 98% de su peso
original por haber estado formados de material volátil como hidrógeno y helio,
mientras que los planetas lejanos conservan enormes cantidades de hidrógeno y
helio.
COMPUESTOS
OXIGENADOS DEL CARBONO
Conforme la atmósfera de la Tierra fue
adquiriendo oxígeno, éste se fue consumiendo en la oxidación de los distintos
elementos y moléculas que existían en ella. Al no haber suficiente oxígeno
atmosférico, no había posibilidad de combustión; tanto el hidrógeno como los
hidrocarburos podían calentarse a elevadas temperaturas sin producción de
fuego.
Fueron necesarios muchos millones de años para que la
cantidad de oxígeno atmosférico se elevara lo suficiente para poder sustentar
la combustión. Ésta es una reacción de oxidación en la que el hidrógeno se
combina con el oxígeno del aire produciendo su óxido, que es el agua. En esta
reacción violenta se produce, además, luz y calor.
2 H2+ O2
2 H2O + calor
Capítulo 3: Radiación solar, Aplicaciones de la radiación, capa
protectora de ozono, fotosíntesis atmósfera oxidante, condiciones apropiadas
para la vida animal.
En el Sol
se están generando constantemente grandes cantidades de energía mediante
reacciones termonucleares. La energía radiante se propaga por el espacio
viajando a razón de 300 000 km por segundo (velocidad de la luz,
c). A
esta velocidad, las radiaciones llegan a la Tierra ocho minutos después de ser
generadas.
Las distintas radiaciones solares, de
las cuales la luz visible es sólo una pequeña parte, viajan por el espacio en
todas las direcciones, como los radios de un círculo, de donde proviene su
nombre.
Debido a que las radiaciones viajan
como ondas a la velocidad de la luz
(c), tendrán como
característica la longitud de onda (
l), que es la distancia entre dos
máximos.
El número de ondas que a una velocidad
constante pasan por un determinado punto cada segundo se le llama frecuencia
(v). Mientras
menor sea la longitud de onda, más ondas pasarán cada segundo, siendo por lo
tanto mayor la frecuencia, y cuando l es mayor, menos ondas pasarán y
por tanto la frecuencia será menor, por lo que, a la velocidad de la luz (c),
la frecuencia será inversamente proporcional a
l.
FOTOSÍNTESIS
En
la fotosíntesis ocurre un proceso similar al descrito para las celdas
fotovoltaicas. Aunque en aquélla no se produce una corriente eléctrica, es sin
embargo más eficiente que el realizado en una celda fotovoltaica artificial. La
clave para tan alta eficiencia reside en la arquitectura molecular y en su
asociación a membranas. Las membranas biológicas consisten en un fluido bicapa
de lípidos anfipáticos especialmente fosfolípidos. La naturaleza anfipática de
estos lípidos se debe a que presentan hacia el exterior la parte polar
(cargada) de los fosfolípidos, la que es atraída hacia el medio acuoso. La
parte interior de la membrana está constituida por las colas (no polares) de
los fosfolípidos que forman una barrera entre los medios acuosos.
Todas
las plantas que desprenden oxígeno poseen ambos fotosistemas, siendo el agua
oxidada en el lado derecho, como se muestra en la figura 13, y el NADP
+ reducido en el
lado izquierdo. Es también interesante notar que existen trampas de luz
(fototrampas), oxidación de agua y reducción de NADP
+. En la oxidación de H
2O la molécula de clorofila sensibilizadora tiene
un pico de absorción de luz a 680 nm y se designa como P680. El complejo total del lado de oxidación de H
2O de la Z es llamado fotosistema II.
Después de la absorción de energía luminosa se forma P680* (excitado), que por
oxidación pasa aP680
+ (oxidado),
mientras se reduce un aceptor que es plastoquinona, acomplejada con heme sin
fierro. El producto reducido es el radical libre de una hemequinona que ha sido
identificado por resonancia spin electrón. La localización en la membrana del P680 y su plastoquinona proviene
de la recombinación de cargas, pero el P680
+ es también rápidamente reducido por los
electrones tomados del agua. De hecho, después de cuatro eventos fotoquímicos
se observa emisión de O
2.
FORMACIÓN
DE AZÚCARES Y OTROS COMPUESTOS ORGÁNICOS.
Los organismos fotosintéticos producen glucosa y otros azúcares a partir del CO
2atmosférico y el agua
del suelo, usando la energía solar acumulada en el ATP y elNADPH
El proceso descubierto por Melvin
Calvin es el siguiente:
6 CO
2 +
18 ATP + 12 H
2O + 12 NADPH + 12 H
+ 
C
6H
12O
6 +
18 Pi + 18 ADP + 12 NADP
+
El azúcar de cinco átomos de carbono se
combina con CO2,
catalizado por la enzima carbonílica 1,5-difosfato de ribulosa, produciendo dos
moléculas de ácido fosfoglicérico, el que se combina entre sí para dar el
azúcar de fruta o glucosa.
Capítulo 4: vida animal, hemoglobina, energía de compuestos orgánicos,
dominio del fuego
La capa de ozono formada por la acción de la luz
ultravioleta dio a la Tierra una protección contra la alta energía de esta
misma radiación, creándose así las condiciones apropiadas para la aparición de
la vida. Las algas verde-azules y los vegetales perfeccionaron el procedimiento
para combinar el
CO2 atmosférico con el agua y los
minerales del suelo con producción de materia orgánica y liberación de oxígeno
que transformaría, en forma lenta pero segura, a la atmósfera terrestre de
reductora en oxidante.
La química, que antes de la aparición
de la vida se efectuaba en el planeta espontánea pero lentamente, ahora se
acelera en forma notable. El oxígeno que se generaba por fotólisis del agua,
ahora se libera de ésta en forma eficiente mediante la reacción de
fotosíntesis, usando la luz solar como fuente de energía.
6
CO2 + 6 H2O
C6H12O6 +
6 O2
El
fierro necesario para la formación de hemoglobina el ser humano lo toma en su
dieta a razón de 1 miligramo por día, acumulándose normalmente 4 gramos de él
en los adultos. Es decir, un ser humano adulto tendría fierro suficiente como
para elaborar un clavo de 4 centímetros de largo.
Otro mineral que el organismo humano
requiere en cantidades apreciables es el muy común metal alcalino térreo
llamado calcio, cuyos compuestos son bien conocidos. Ejemplo de esto son la cal
y el mármol.
La cantidad de calcio que un adulto
necesita ingerir diariamente en su dieta es de alrededor de 1 gramo, es decir,
la cantidad que corresponde al contenido de calcio en un trozo de mármol de 2.5
gramos. El fósforo es otro de los elementos indispensables para el
funcionamiento del organismo humano por lo que requiere ingerir diariamente en
los alimentos alrededor de 1 gramo.
El uso del opio como sustancia
analgésica es conocido desde tiempos muy remotos; los griegos la usaron varios
siglos antes de Cristo.
Uno de los principales
constituyentes del opio, la morfina, fue aislado en 1803 por el farmacéutico
alemán Sertürner.
El comportamiento de la morfina como
analgésico es impresionante, ya que además de calmar el dolor, causa euforia,
regula la respiración y es antidiarreico. Es un analgésico tan poderoso que se
usa en las últimas fases del cáncer.
Como contrapartida de
las maravillosas propiedades de la morfina, se tiene la de crear dependencia.
La persona que fue tratada con ella desea volver a tener la experiencia
obtenida con la inyección. La repetición de la inyección crea necesidad y
cuando esta necesidad no se satisface, el sujeto sufre de los síntomas que la
morfina alivió: dolor abdominal, diarrea, respiración agitada, taquicardia,
náuseas, sudor y otros dolores.
DESCUBRIMIENTO DEL FUEGO
El cerebro del hombre crece, piensa, memoriza, aprende nuevas cosas hasta que
un día, cuando menos se lo espera, descubre el fuego, aprende a dominarlo y
transmite el conocimiento de generación en generación.
Precisamente un paso fundamental en el
dominio de la naturaleza lo dio el hombre primitivo cuando aprendió a dominar
el fuego; en ese momento encontró la manera de liberar a voluntad la energía
que los vegetales habían tomado de la radiación solar y acumulada en forma de
materia orgánica. Ahora el hombre tenía la luz y el calor y su vida era más
fácil, ya que dominaba la oscuridad y el frío de la noche y al mismo tiempo
ahuyentaba a los animales peligrosos.
El fuego es la primera reacción química
que el hombre domina a voluntad; en esta importante reacción exotérmica se
libera, en forma rápida, la energía que el organismo animal liberaba de los
alimentos en forma lenta e involuntaria. El hombre aprendió a iniciar la
reacción o a avivarla aumentando el oxígeno al soplar sobre las brasas en
contacto con leña seca, y más tarde supo iniciarlo con chispas y por fricción.
ENVEJECIMIENTO
Indudablemente, mientras más tiempo ha durado un
objeto inanimado, su aspecto más se deteriora. Así, por ejemplo, los objetos de
hierro que fueron bellos y brillantes, pronto pierden su brillo y tarde o
temprano se cubren de la herrumbre que los corroe; los objetos de hule se
vuelven quebradizos; lo mismo pasa con los bellos objetos de piel, que con el
tiempo se deterioran volviéndose quebradizos porque se avejentan. Procesos
todos ellos en que mucho tiene que ver el oxígeno: el hierro se oxida con el
tiempo, al igual que el hule y el cuero que lo fueron en su proceso de
envejecimiento. El aspecto de los seres vivos cambia también con el tiempo: se
hacen viejos. El tiempo que se mide por el número de días, meses y años
transcurridos, bien podría medirse por el número de respiraciones o por el
volumen de oxígeno que ha usado el cuerpo desde su nacimiento hasta su muerte.
Los radicales libres están implicados
en el proceso del envejecimiento del ser humano. Un intermediario clave es el
superóxido O-O , formado por reducción del 02 molecular por varios reductores
in
vivo,
Los antioxidantes son importantes en el
tejido canceroso en donde la concentración de tocoferol es mayor que en tejido normal.
Son también importantes en la prevención de oxidación de lípidos en los
tejidos.
El envejecimiento biológico puede ser
debido al ataque de radicales hidroxilo H O
. sobre las células no regenerables
del cuerpo. Estos radicales pueden provenir de generación indeseable en la
cadena alimenticia o por irradiación ultravioleta u otra radiación de alta
energía.
Se puede entonces pensar que los
antioxidantes detendrán el envejecimiento; el problema es que muchos
antioxidantes sintéticos, aunque más eficaces in vitro que los
biológicos, producen reacciones secundarias indeseables en el organismo.
Capítulo 5. Importancia de las
plantas en la vida del hombre: usos mágicos y medicinales
U
na vez que el hombre aprendió a
dominar el fuego, estuvo en condiciones de fabricar recipientes de arcilla, los
que, endurecidos por el fuego, le servirán para calentar agua, cocinar
alimentos y hacer infusiones mágicas y medicinales. De esta manera los aceites
esenciales arrastrados por el vapor de agua aromatizaban la caverna y se
condensaban en el techo, con lo que se separaban las sustancias químicas
contenidas en las plantas. De esta manera se descubrió que los aceites
esenciales no solo tenían olor agradable, sino que muchos de ellos tenían
además propiedades muy útiles, como eran las de ahuyentar a los insectos y de
curar algunas enfermedades.
El conocimiento de las plantas y sus
propiedades seguía avanzando: ya no sólo las usaba el hombre como alimentos,
combustible y material de construcción, sino también como perfume, medicinas y
para obtener colorantes, que empleaba tanto para decorar su propio cuerpo y sus
vestiduras, como para decorar techo y paredes de su cueva.
Es evidente que la necesidad de
alimentación era primordial y que los testimonios del uso medicinal de las
plantas son menos frecuentes; sin embargo, los chinos han dejado constancias
escritas desde hace más de 4000 años acerca del uso antimalárico de la droga
chaáng shan que corresponde a la planta
Dichroa febrifuga, Lour.
Los estudios modernos han demostrado la existencia en esa planta del alcaloide
antimalárico llamado febrifugina.
La primera obra que se conoce sobre las
propiedades medicinales de plantas, es debida al médico indígena Martín de la
Cruz, quien la escribe en lengua náhuatl durante el año de 1552. La traducción
al latín hecha por Juan Badiano, denominada
Libellus de medicinalibus
indorum herbis, se conoce gracias a que Charles Upson Clark la
encontró en la Biblioteca Barberini durante los estudios que realizó en Roma de
1916 a 1919.
El rey de España, Felipe II, al tener
noticias de que en la Nueva España existían más plantas y semillas medicinales
que en ninguna otra parte del mundo, envió a Francisco Hernández,
"protomédico e historiador general de las Indias, Islas y tierra firme del
mar océano", para realizar una investigación médico-botánica
en la Nueva España,
después de llevar a cabo esta investigación encontró 3 076 plantas y sus
usos medicinales. Francisco Hernández no se limitó al estudio de plantas, sino
que hizo también un amplio recuento de los animales y minerales.
DROGAS ESTIMULANTES CON FINES MÁGICOS Y RITUALES
El peyote, empleado por los pueblos del
Noroeste, se sigue usando en la actualidad y se le considera una planta divina.
Cuando este cactus es comido, da resistencia contra la fatiga y calma el hambre
y la sed, además de hacer entrar al individuo a un mundo de fantasías, que lo
hace sentir la facultad de predecir el porvenir. En busca de tan maravillosa
planta los huicholes hacen peregrinaciones anuales, desde sus hogares en el
norte de Jalisco y Nayarit, hasta la región desértica de Real de Catorce en San
Luis Potosí, que es donde crece este cactus. Los efectos del peyote duran de
seis a ocho horas
.

Su empleo entre los
indígenas no se debe a hábito, sino que obedece a ritos religiosos. El
principio activo del peyote
(Anhalonium Williamsi) es el
alcaloide llamado mescalina.
OLOLIUQUI
La planta mexicana llamada ololiuqui por los mexicas corresponde, según los
estudios botánicos recientes, a la enredadera
Turbina corymbosa, de
la familia Convolvulácea. El ololiuqui tenía un amplio uso mágico-religioso en
el México prehispánico. Según los primeros escritos posteriores a la conquista
la semilla molida era usada, mezclada con otros vegetales, para ungir a
sacerdotes indígenas, quienes pretendían adquirir la facultad de comunicarse
con sus dioses.
Las propiedades medicinales del
ololiuqui han sido mencionadas por Francisco Hernández, quien dice que es útil
contra la gota.
Albert Hoffmann encontró en 1960
alcaloides del tipo del ácido lisérgico. Entre ellos obtuvo, en forma
cristalina, la amida del ácido lisérgico y su epímero, la amida del ácido
isolisérgico, ambos con fórmula
C16H17ON3,
además del alcaloide de hongos, la chanoclavina. Los mismos alcaloides se encontraron
en otra convolvulácea, la
Ipomea tricolor.
Hoffmann ensayó las amidas del ácido
lisérgico y del ácido isolisérgico, pero no encontró en ellos propiedades
alucinógenas, pues sólo le produjeron cansancio, apatía y somnolencia.
Los glucósidos encontrados en la planta
también tuvieron actividad relajante.
HONGOS
Ciertos hongos fueron usados con fines rituales en varias regiones del
territorio mexicano y la práctica continúa también hasta nuestros días.
Existen muchos más ejemplos de plantas
medicinales y alucinógenas. Todas ellas son un interesante material para
realizar estudios químicos.
La flora sudamericana no se queda atrás
de la mesoamericana y como ejemplo bastará mencionar el caso del llamado
curare, un preparado obtenido a partir
de diversas plantas y usado como veneno de flechas.
La palabra
curare es una adaptación
al español de una frase que en la lengua de una de las tribus sudamericanas
significa "matar aves".
Es un extracto acuoso de
varias plantas, entre las que se encuentran generalmente especies de
Chondodendron
cissampelos y
Strychnos.
Para su preparación, el brujo de la
tribu hace hervir por varias horas en una olla de barro los diferentes
vegetales; el agua que se pierde por evaporación es sustituida por adición de
más agua; mientras se mantiene la ebullición se agita la mezcla y se agregan
otras sustancias venenosas como hormigas y colmillos de serpiente. Cuando el
extracto adquiere cierta consistencia y color, el brujo considera que ya está
listo; lo hace saber a los asistentes a la ceremonia, y cesan la música y el
baile que había acompañado todo el proceso de preparación del curare. Se
reparte a los allí presentes un poco de la sustancia recién preparada para su
uso en la cacería.
Con este material impregnarán las
puntas de flecha y dardos de cerbatanas para cazar animales pequeños; cuando
éstos son heridos, aunque sea ligeramente, morirán por efecto del veneno.
Entre las plantas venenosas que con
mucha frecuencia se emplean en la preparación del
curare se encuentran diversas especies de
Strychnos. Estas
plantas son muy venenosas debido a que contienen, entre otros alcaloides, la
estricnina, sustancia tóxica que se usa para exterminar roedores y para matar
animales de pieles finas. Cuando un ser humano u otro mamífero es envenenado
con
curare, comienza por perder el
habla, después se le paralizan los miembros y los músculos faciales, hasta que,
finalmente, le llega la muerte.

La flora sudamericana es rica en
plantas medicinales. Los polvos de corteza de quina adquirieron gran fama como
medicina antimalárica después de que la marquesa de Chinchón, esposa del virrey
del Perú, fue curada de paludismo con esa droga. El género de plantas andinas
antipalúdicas fue llamado Cinchona y la medicina fue introducida a Europa desde
1640.
Como este medicamento, muchos otros de
origen vegetal fueron usados por el hombre; aunque por ser de que se pudieran
aislar los principios activos al estado puro, para así poder dosificarlos bien.
No fue sino hasta finales del siglo
XVIII (1772-1777) que Lavoisier demostró que el aire está constituido por
nitrógeno y oxígeno, y que en la combustión el oxígeno se combina con el
carbono de las sustancias orgánicas para dar bióxido de carbono y agua.
C
6H
12O
6+6O
2 
6CO
2+6H
2O
Basado en este descubrimiento,
Lavoisier elaboró un método para analizar los compuestos orgánicos. Para saber
cuántos átomos de carbono tenía una molécula, bastaba medir cuidadosamente el
CO2 producido,
y de la cantidad de agua obtenida, se calcularía el número de hidrógenos en la
molécula. Los estudios de Lavoisier crearon las condiciones apropiadas para que
naciera la
química de productos naturales. Los principios
activos contenidos en plantas curativas conocidas desde la Antigüedad
comenzaron entonces a ser aislados y a ser establecida su fórmula. En 1805, el
farmacéutico alemán Sertürner aisló la morfina del opio. En 1820, Pelletier y
Caventou aislaron de la quina los alcaloides quinina y cinchonina. Por la misma
época, otros principios activos fueron aislados y analizados en cuanto a su
contenido de carbono, oxígeno y algunos otros elementos como nitrógeno.
Las investigaciones químicas siguieron
así perfeccionando sus conocimientos y ya no se conformaban con efectuar un
simple análisis que encontrara cuántos átomos de cada elemento existen en la
molécula, si no que querían saber cómo estaban acomodados, es decir la
estructura de cada compuesto.
Para la determinación de la estructura
de un compuesto tan simple como el alcanfor, cuya fórmula empírica C
10H
16O,
encontrada por Dumas, se necesitó emplear 60 años de arduo trabajo. Más aún, en
la determinación estructural de una sustancia más complicada como la quinina,
se invirtieron más de 100 años.
Sin embargo, con el tiempo los químicos
adquirieron día tras día más habilidad en el aislamiento, purificación y
determinación estructural de productos naturales.
Nadie pensaba en sintetizar estas
sustancias naturales porque en aquel tiempo se creía que para que dichos
compuestos se formaran era indispensable una fuerza vital, es decir que sólo se
podían formar dentro de organismos de seres vivos y lo único que el hombre
podía hacer era aislarlos.
No fue sino hasta 1828 cuando el
químico Friedrich Wöhler, en el curso de un experimento con el compuesto
considerado mineral, isocianato de amonio, obtuvo su transformación en el
compuesto natural urea.
H
4NOCN

CO ( NH
2)
2
isocianato de amonio urea
Demostrándose que la síntesis de
compuestos orgánicos
es posible.
En 1973, del número total de
prescripciones médicas administradas en Estados Unidos, más de 40% contenían
productos naturales, entre los que predominaban los de naturaleza esteroidal,
seguidos por varios alcaloides como la codeína. La quinina sigue usándose en la
actualidad a pesar de la competencia que representan las numerosas drogas sintéticas.
En México se iniciaron en 1941
plantaciones de 600 hectáreas de la finca Guatimoc, del Estado de Chiapas, con
semillas traídas precisamente del sureste de Asia. Esas plantaciones quedaron
abandonadas y constituidas por árboles muy viejos de bajo contenido de
alcaloides, formando una mezcla dentro de la cual existe poca quinina.
Por lo general, cuando el químico aísla
y determina la estructura de una sustancia con propiedades interesantes, y
sobre todo si su precio es alto, se intenta su síntesis, al mismo tiempo que se
ensayan productos sintéticos que, aunque con distinta estructura, tengan
actividad similar.
ZOAPATLE,
CIHUAPALLI (MEDICINA
DE MUJER).
Esta planta era utilizada por las mujeres indígenas para inducir al parto o
para corregir irregularidades en el ciclo menstrual. En la actualidad, su
empleo sigue siendo bastante extendido con el objeto de facilitar el parto,
aumentar la secreción de la leche y de la orina y para estimular la
menstruación.
Los estudios químicos del zoapatle se
comenzaron a realizar desde fines del siglo pasado, aunque el aislamiento de
sus productos puros no se efectuó sino hasta 1970, cuando se obtuvieron de la
raíz varios derivados del ácido kaurénico. En 1971 se aislaron lactonas
sesquiterpénicas y a partir de 1972 se inician estudios que culminan con el
aislamiento de los diterpenos activos llamados zoapatanol y montanol. Las
patentes para la obtención de estos productos fueron adquiridos por la compañía
farmacéutica estadounidense Ortho Corporation. La síntesis de zoapatanol fue
llevada a cabo en 1980.
De otras especies de Montanoa conocidas también como
zoapatle, y usadas con el mismo fin, se han aislado diterpenos con esqueleto de
kaurano, tales como el ácido kaurénico, al que se le han encontrado propiedades
relajantes de la actividad uterina.
Capítulo 6. Fermentaciones, pulque, colonche,
tesgüino, pozol, modificaciones químicas
M
UCHOS microorganismos son capaces de provocar
cambios químicos en diferentes sustancias, especialmente en carbohidratos. Es
de todos conocidos el hecho de que al dejar alimentos a la intemperie en poco
tiempo han alterado su sabor y, si se dejan algún tiempo más, la fermentación
se hace evidente comenzando a desprender burbujas como si estuviesen hirviendo.
Esta observación hizo que el proceso fuese denominado fermentación. Esta
reacción, que ocurre en forma espontánea, provocada por microorganismos que ya
existían o que cayeron del aire, hacen que la leche se agrie, que los frijoles
se aceden y otros alimentos se descompongan, y que el jugo de piña adquiera
sabor agrio y llegue a transformarse en vinagre.
Estos hechos fueron conocidos desde las
épocas más remotas, siendo quizá la fermentación el proceso químico más antiguo
que el hombre pudo controlar. Éste observó que las uvas con el tiempo adquirían
un cierto sabor al que llegó a aficionarse; así, el vino llegó a producirse en
la región del Tigris y en Egipto desde hace ya varios miles de años. Los
mercaderes griegos llevaron la uva y su cultivo a Marsella desde 600 años a.C.
y su cultivo se extendió hasta el Rin desde 200 años a. C.
PULQUE
El pulque fue en Mesoamérica lo que el vino fue para los pueblos mediterráneos.
El pulque fue una bebida ritual para
los mexicas y otros pueblos mesoamericanos. Era la bebida que se daba en las
bodas, que se les daba a beber a los guerreros vencidos que iban a ser
inmolados, la que se usaba en importantes ceremonias religiosas, etc. Estuvo
tan arraigada en la cultura autóctona, que no bastaron 300 años de esfuerzos de
las autoridades coloniales para eliminar su consumo, ni han bastado tampoco 176
años de esfuerzos de la sociedad independiente por desprestigiarla y tratar de
sustituirla por otras bebidas obtenidas por fermentación, muy altamente
prestigiadas por ser originarias de los pueblos europeos, cuya cultura se ha
impuesto, como la cerveza y el vino, que cuentan con los medios masivos de
comunicación para exaltar sus virtudes y el buen gusto que implica el
consumirlas y ofrecerlas. A pesar del constante bombardeo propagandístico de
los medios de comunicación, no se ha logrado eliminar la práctica ancestral de
consumir pulque en las comunidades rurales y, todavía en escala significativa,
en las ciudades.
El pulque es el producto de la
fermentación de la savia azucarada o aguamiel, que se obtiene al eliminar el
quiote o brote floral y hacer una cavidad en donde se acumula el aguamiel en
cantidades que pueden llegar a seis litros diarios durante tres meses.
FERMENTACIÓN ALCOHÓLICA
La fermentación alcohólica producida por levaduras ha sido utilizada por todos
los diferentes pueblos de la Tierra.
En la obtención industrial de
etanol se usan diversos sustratos; entre ellos, uno de los principales son las
mieles incristalizables que quedan como residuo después de la cristalización
del azúcar en los ingenios.
Muchos sustratos con alto
contenido de azúcares y almidones se utilizan en la preparación de bebidas
alcohólicas como la cerveza, que tiene muy amplio consumo en el ámbito mundial.
Pero no sólo para la producción de alcohol o vino se emplea la levadura, un
empleo muy antiguo y actualmente generalizado en el mundo entero es la
fabricación de pan.
El uso de la levadura en la
fabricación del pan fue descubierto por los egipcios varios siglos antes de
Cristo. El historiador griego Heródoto menciona su empleo en las panaderías
egipcias desde 500 años antes de Cristo.
Al mezclarse la levadura con la
masa de harina se lleva a cabo una fermentación por medio de la cual algunas
moléculas de almidón se rompen para dar glucosa, la que se sigue fermentando
hasta dar alcohol y bióxido de carbono (CO2). Es este gas el que
esponja la masa de harina y hace que el pan sea suave y esponjoso. De no haber
puesto levadura, el pan hubiese tenido la consistencia de una galleta. Junto
con el alcohol se producen algunos ácidos que le imparten al pan su muy
apreciado sabor.
Fermentación láctica
La leche es fermentada por varios microorganismos
tales como Lactobacillus casei, o por cocos como el Streptococcus
cremoris, transformándose
en alimentos duraderos como yogur y la gran variedad de quesos tan preciados en
la mesa.
La acidez de la leche fermentada
se debe al ácido láctico que se forma por la transformación de los azúcares de
la leche (de la lactosa). Este mismo tipo de fermentación es el que sufre la
col en la preparación del sauerkraut de tan amplio consumo en la mesa de los
pueblos europeos.
Capítulo 7: Jabones, Saponinas y Detergentes.
Muchas
veces hemos visto
maravillados cómo en una fría mañana invernal los patos nadan en el estanque
sin una aparente preocupación por ser mojados por las frías aguas; cuando por
fin dejan el estanque, simplemente se sacuden de las gotas superficiales y su
plumaje queda tan seco como antes de su contacto con el agua. Al observar las
aguas estancadas es frecuente ver insectos que con gran seguridad van y vienen
corriendo sobre la superficie del agua. Ambos fenómenos tienen que ver con el
hecho muy conocido de que el agua y el aceite no se mezclan.
Tanto el cuerpo del insecto como
el plumaje de los patos se encuentran cubiertos por una capa de grasa que los
hace impermeables.
Cuando la ropa u otros objetos se
manchan con grasa y tratamos de lavarlos con agua sucederá lo mismo que con el
plumaje de los patos: el agua no moja a la mancha de aceite. El agua, por lo
tanto, no sirve para limpiar objetos sucios con aceites o grasas; sin embargo,
con la ayuda de jabón o detergente sí podemos eliminar la mancha de grasa. El
efecto limpiador de jabones y detergentes se debe a que en su molécula existe
una parte lipofílico por medio de la cual se unen a la grasa o aceite, mientras
que la otra parte de la molécula es hidrofílico, tiene afinidad por el agua,
por lo que se une con ella; así, el jabón toma la grasa y la lleva al agua
formando una emulsión.
SAPONIFICACIÓN
Los
jabones se preparan por medio de una de las reacciones químicas más conocidas:
la llamada saponificación de aceites y grasas.
Los aceites vegetales, como el aceite
de coco o de olivo, y las grasas animales, como el sebo, son ésteres de
glicerina con ácidos grasos. Por eso cuando son tratados con una base fuerte
como sosa o potasa se saponifican, es decir producen la sal del ácido graso
conocida como jabón y liberan glicerina. En el caso de que la saponificación se
efectúe con sosa, se obtendrán los jabones de sodio, que son sólidos y ampliamente
usados en el hogar. En caso de hacerlo con potasa, se obtendrán jabones de
potasio, que tienen consistencia líquida.
Con frecuencia se agrega brea en el
proceso de saponificación obteniéndose así jabones en los que, junto con las
sales de sodio de ácidos grasos, se tendrá la sal de sodio de ácidos resínicos,
lo que los hace más solubles y más apropiados para lavar ropa. Evidentemente se
podrán obtener sales de ácidos grasos con otros metales, especialmente con
calcio, ya que el hidróxido más abundante y barato es la cal,
Ca(OH)2.
Ahora bien, si la saponificación se hace con cal, el producto será el jabón de
calcio,
Ca (OCOR)2. El problema es que este jabón es un
sólido duro e insoluble, por lo que no sirve para los fines domésticos a los
que se destinan los jabones de sodio.
Los
jabones de sodio tienen un amplio uso en nuestra civilización, por lo que la
industria jabonera es una de las más extensamente distribuidas en el mundo
entero.
FABRICACIÓN DE JABÓN
El proceso de fabricación de jabón es, a grandes rasgos, el siguiente: se
coloca el aceite o grasa en un recipiente de acero inoxidable, llamado paila,
que puede ser calentado mediante un serpentín perforado por el que se hace
circular vapor. Cuando la grasa se ha fundido ±8Oº, o el aceite se ha calentado,
se agrega lentamente y con agitación una solución acuosa de sosa. La agitación
se continúa hasta obtener la saponificación total. Se agrega una solución de
sal común
(NaCl) para que el jabón se separe y quede flotando
sobre la solución acuosa.
Se recoge el jabón y se le agregan
colorantes, perfumes, medicinas u otros ingredientes, dependiendo del uso que
se le quiera dar. El jabón se enfría y se corta en porciones, las que enseguida
se secan y prensan, dejando un material con un contenido de agua superior al
25%.
ENZIMAS
Estos materiales adquirieron gran popularidad en Estados Unidos y Europa en la
década de los sesenta debido a su facultad de eliminar manchas proteicas o
carbohidratos, aun en el remojo. Los detergentes con esta formulación son capaces
de eliminar manchas de sangre, huevo, frutas, etcétera.
Con todo, estos detergentes han
producido problemas de salud en los obreros que trabajan en su elaboración. Por
suerte, hasta ahora no los han provocado en las amas de casa.
El problema con los obreros se
debió principalmente a que los detergentes producen polvo que, al ser aspirado,
pasa a los pulmones. Esto se ha resuelto fabricando detergentes con gránulos
mayores, para que no produzcan polvo.
Los fabricantes de detergentes de
Europa y Japón están poniendo enzimas en la mayor parte de sus productos.
Entre las sustancias que se
agregan a los detergentes para mejorar sus características se encuentran
ciertas sustancias que protegen a las telas contra la fijación del polvo del
suelo o el atmosférico. Estas sustancias, que mantienen a las telas limpias por
más tiempo al evitar la reimplantación del polvo, son sin duda de gran
utilidad, pues evitan trabajo y deterioro de la tela.
Una sustancia con esas
propiedades es la carboxi-metilcelulosa, que es eficiente en algodón y otras
telas celulósicas, pero falla con telas sintéticas. Para estas últimas es útil
el uso de 1 a 6% de ácido poliacrílico o de poliacrilatos. Los
ácidos carboxílicos secuestran la dureza del agua reaccionando con las sales
metálicas presentes en esas aguas. El tripolifosfato de
sodio es un excelente secuestrante y por muchos años se ha usado con óptimos
resultados. Por desgracia en los Estados Unidos se empezaron a observar efectos
de eutrofisación de las aguas, por lo que su uso está siendo severamente
restringido.
Lo mismo está sucediendo en
Europa, donde también se han descubierto daños por eutrofisación, fenómeno que
consiste en el aumento de nutrientes a un ritmo excesivo, por lo que al
descomponerse la materia prima orgánica que ingresa (detergentes), disminuye el
oxígeno disuelto, alterando la vida en las aguas. La
industria de jabones y detergentes que contribuye a mantener a nuestro mundo
libre de inmundicias, es muy grande. En 1984 fue de 24 millones de toneladas y
tan sólo en América Latina se produjeron 2.7 millones de toneladas.
Capítulo 8: Hormonas Vegetales y animales, feromonas, síntesis de
hormonas a partir de sustancias vegetales.
Las plantas no sólo necesitan
para crecer agua y nutrientes del suelo, luz solar y bióxido de carbono
atmosférico. Ellas, como otros seres vivos, necesitan hormonas para lograr un
crecimiento armónico, esto es, pequeñas cantidades de sustancias que se
desplazan a través de sus fluidos regulando su crecimiento, adecuándolos a las
circunstancias. Cuando la planta germina, comienzan a actuar algunas sustancias
hormonales que regulan su crecimiento desde esa temprana fase: las
fitohormonas, llamadas giberelinas, son las que gobiernan varios aspectos de la
germinación; cuando la planta surge a la superficie, se forman las hormonas
llamadas auxinas, las que aceleran su crecimiento vertical, y, más tarde,
comienzan a aparecer las citocininas, encargadas de la multiplicación de las
células y que a su vez ayudan a la ramificación de la planta.
La existencia de auxinas fue
demostrada por F. W. Went en 1928 mediante un sencillo e ingenioso experimento,
que consiste a grandes rasgos en lo siguiente: a varias plántulas de avena
recién brotadas del suelo se les cortaba la punta, que contiene una vainita llamada
coleóptilo; después del corte, la planta interrumpía su crecimiento. Si a
alguna planta decapitada se le volvía a colocar la puntita, se notaba que
reanudaba su crecimiento, indicando que en la punta de las plántulas de avena
existía una sustancia que la hacía crecer.
EL
MOVIMIENTO DE LAS PLANTAS
Es perfectamente conocido por todos el que las flores del girasol ven hacia el
Oriente por la mañana y que voltean hacia el Poniente por la tarde, siguiendo
los últimos rayos del Sol. Es también interesante observar cómo los colorines y
otras leguminosas, cuando se ha ocultado el Sol, doblan sus hojas como si
durmieran y cómo se enderezan a la mañana siguiente para recibir la luz del
Sol. Más impresionante todavía quizá es el caso de la vergonzosa (Mimosa pudica). Esta bella, aunque pequeña planta, que
tiene hojas pinadas, al más pequeño roce contrae sus hojas, aparentando
tenerlas marchitas.
Todos estos
movimientos de las plantas son provocados por sustancias químicas.
FEROMONAS DE MAMÍFEROS
El que los animales respondan a señales químicas se sabe desde la Antigüedad:
los perros entrenados siguen a su presa por el olor.
Las sustancias químicas son a
veces características de un individuo que las usa para demarcar su territorio.
Más aún, ciertas sustancias le sirven para atraer miembros del sexo opuesto.
El marcar su territorio le ahorra
muchas veces el tener que pelear, ya que el territorio marcado será respetado
por otros congéneres y habrá pelea sólo cuando el territorio marcado sea
invadido.
Las manadas de leones o los
grupos de lobos tienen su territorio de grupo. Estos territorios son marcados
con frecuencia con orina, con heces, o con diferentes glándulas, tal como lo
hace el gigantesco roedor sudamericano, el capibara, con la glándula nasal.
Estas secreciones están
compuestas por una gran variedad de sustancias químicas, las cuales sirven para
identificar la especie, el sexo y aun a un individuo particular.
Se piensa que la secreción de las
glándulas especiales debe estar compuesta por feromonas, pero sólo unas pocas
han podido ser probadas como tales. De la misma forma, es probable que la
orina, las heces y la saliva también contengan feromonas, pero ha resultado
difícil comprobarlo.
HORMONAS SEXUALES
El ser humano, al igual que otros seres vivos, produce hormonas que ayudan a
regular sus funciones. Entre las diversas hormonas que aquél produce se
encuentran las hormonas sexuales. Éstas son sustancias químicas pertenecientes
al grupo de los esteroides, pertenecientes al mismo grupo que el de los ácidos biliares
y el colesterol.
Las hormonas sexuales
son producidas y secretadas por los órganos sexuales, bajo el estímulo de
sustancias proteicas que llegan, por medio de la corriente sanguínea, desde el
lóbulo anterior de la pituitaria en donde estas últimas se producen.
HORMONAS MASCULINAS (ANDRÓGENOS)
Las hormonas
masculinas son las responsables del comportamiento y las características
masculinas del hombre y otros similares.
Los caracteres sexuales
secundarios que en el hombre son, entre otros, el crecimiento de barba y
bigote, en el gallo son muy notables y han servido para evaluar sustancias con
actividad de hormona masculina.
Cuando un gallo es castrado, su
cresta y espolones disminuyen en tamaño hasta casi desaparecer. Si a este gallo
se le administra una hormona masculina como testosterona o androsterona, la
cresta y espolones vuelven a crecer.
HORMONAS FEMENINAS (ESTRÓGENOS)
Las hormonas femeninas son sustancias esteroidales producidas en el
ovario. Estas sustancias dan a la mujer sus características formas redondeadas
y su falta de vello en el rostro.
La hormona responsable de estas
características en la mujer se llama estradiol y tiene la estructura mostrada
en seguida:
Por
muchos años se creyó que la hormona femenina era la estrona, una sustancia
encontrada en la orina femenina. Sin embargo, esta sustancia, que ciertamente
tiene actividad hormonal, es en realidad un producto de descomposición de la
verdadera hormona femenina, que es el estradiol.
El estradiol se obtuvo por primera vez
mediante reducción de la estrona aislada de la orina y mostró ser una hormona
nueve veces más potente que la estrona.
Su aislamiento se logró en 1935 por
Doisy y su grupo. De 1.5 kg de ovarios de puerca se aislaron tan sólo 12 mg de
estradiol en forma de su di-a-naftoato.
Evidentemente la
obtención de estradiol era inadecuada y por muchos años se siguió aislando la
estrona de orina tanto de yegua como de mujer.
La estrona
era por lo tanto aplicada directamente, pero parte de ella era transformada,
por medio de una reducción, en la auténtica y muy potente hormona femenina, el
estradiol.
Capítulo 9: Guerras Químicas y Accidentes Químicos
GUERRA QUÍMICA
A
NTES de que el hombre apareciera sobre
la Tierra ya existía la guerra. Los vegetales luchaban entre sí por la luz y
por el agua y sus armas eran sustancias químicas que inhiben la germinación y
el crecimiento del rival. La lucha contra insectos devoradores ha sido
constante durante millones de años. Las plantas mal armadas sucumben y son
sustituidas por las que, al evolucionar, han elaborado nuevas y más eficaces
sustancias que las defienden. Los insectos también responden, adaptándose hasta
tolerar las nuevas sustancias; muchos perecen y algunas especies se extinguen,
pero otras llegan a un acuerdo y logran lo que se llama simbiosis, brindándose
ayuda mutua, como el caso de la
Yucca y la
Tegeticula mexicana. En
esta vida en simbiosis, la
Yucca proporciona alimento y
materia prima hormonal a la mariposa nocturna. Ésta, en cambio, se encarga de
polinizar las flores de la planta asegurándole así su fructificación y
reproducción.
De la misma forma, las abejas toman
néctar y polen de las flores, pero a cambio ayudan a la fructificación y por
consiguiente a la reproducción de la planta al polinizar sus flores.
La
Acacia
cornigera, que tiene espinas huecas, es hogar de gran cantidad de
hormigas del género
Pseudomyrmex, que no sólo viven en la
planta, sino que se alimentan del líquido azucarado que ésta secreta por medio
de sus grandes glándulas foliares. A cambio de casa y comida, las hormigas
defienden a la planta contra otros depredadores.
GUERRA ENTRE INSECTOS Y DE INSECTOS CONTRA
ANIMALES MAYORES
Muchos insectos poseen aguijones conectados a glándulas productoras de
sustancias tóxicas con los que se defienden de los intrusos. Las avispas y las
abejas son insectos bien conocidos por inyectar sustancias que causan dolor y
alergias. El hombre conoce bien estas cualidades, pues muchas veces por
perturbar la tranquilidad del enjambre ha sido inyectado con dopamina o histamina,
sustancias entre otras que son responsables del dolor, comezón e hinchazón de
la parte atacada.
EL HOMBRE USA LA QUÍMICA PARA LA GUERRA
Posiblemente la primera reacción química que el hombre aprovechó para destruir
a su enemigo fue el fuego. La misma reacción de oxidación que logró dominar
para tener luz y calor, para cocinar alimentos y fabricar utensilios, en fin,
para hacer su vida más placentera, fue usada para dar muerte a sus congéneres
al quemar sus habitaciones y cosechas.
Al pasar el tiempo el hombre
inventa un explosivo, la mezcla de salitre, azufre y carbón, que es usada en un
principio para hacer cohetes que alegraron fiestas y celebraciones. Este
descubrimiento, atribuido a los chinos, fue utilizado posteriormente por el
hombre para disparar proyectiles y así poder cazar animales para su sustento.
Pero el hombre, siempre agresivo,
terminó por emplear el poder explosivo de la pólvora para hacer armas guerreras
y así enfrentarse a su enemigo. Más tarde se fueron
descubriendo explosivos más poderosos. Varios productos nitrados, por su alto
contenido de oxígeno, son buenos explosivos.
Mi
opinión sobre este libro es que vienen varios temas diferentes con historias
diferentes que nos hacen entender con mas facilidad las cosas que estamos
leyendo el libro se puede decir que tiene temas no muy comunes pero que son
fáciles al leerlo, me gusto porque tiene formulas y explicaciones como ejemplos
del tema para entender mejor, la redacción está muy bien el libro habla de
químicas pero conforme en la vida cotidiana, en lo personal este libro es muy
pequeño lo que me gusto mas es que no tenía dibujitos en todas las páginas.